Que alguien le diga...!!!!

QUE ALGUIEN LE DIGA..!! Como si los males de nuestro tiempo fueran pocos, Santa Cruz se sacude con la publicidad de un caso de violación en la persona de un reconocida modelo de nuestro medio., con el agravante de la publicación de unas fotografías obscenas por internet, supuestamente tomadas por el agresor a la víctima. Como es de suponer, un hecho como éste, es carne fresca para los buitres de la prensa que inmediatamente forman un circo y antes que el mismo poder judicial, ya tienen definido quién es la víctima y quién el victimario y en virtud a su propio criterio, manipulan la opinión pública de un pueblo sufrido que busca como distraer sus penas. Yo, simple ciudadana de este pueblo, bajo los efectos de esa publicidad y en la creencia de que los hechos han sucedido tal cual los relata, la principal protagonista de esta historia, me atrevo a hacer algunas apreciaciones. Primero: Si Rodrigo Gutierrez cometio los delitos de los cuales se le acusa, debería ser azotado en plaza pública, por perverso y depravado, pero más que todo, por ser la vergüenza de nuestros hombres. Aún en el caso en que no fuera una violación, sinó más bien un hecho de común acuerdo, lo terriblemente imperdonable sería la publicación de esas fotos que no tienen otro propósito que denigrar a una joven mujer. Hecho éste que demuestra una vez más, que el dinero no compra virtudes ni valores, pero sí puede contribuir a formar héroes o villanos. Y penosamente en éste caso, parece que hizo un canalla además de un villano. Dicen por ahí, que para saber que clase de ser humano es una persona, hay que mirar como trata a su madre y a su empleado. Entonces es evidente de quién hablamos. Segundo: Asumiendo que Alejandra Urioste es la victima de un hecho tan perverso, todas las mujeres debemos sentirnos agredidas y elevar nuestra voz de protesta, para que a la justicia no le tiemble la mano a la hora de dictar una sentencia. Solo el hecho de afrontar un juicio de violación, puede convertir a una mujer en una perfecta heroína, pues es un proceso tan humillante, que requiere de mucho valor para enfrentarlo. Pero hay algo más terrible aún para la víctima y es el hecho de ser violada dos veces; primero por Rodrigo Gutierrez y luego por la prensa amarillista y morbosa que no tiene límites en su mediocridad informativa. Se disputan las “primicias” como una jauria de perros y sin el menor vestigio de ética profesional, mucho menos sensiblidad con las victimas, hasta se pelean de forma grosera y vulgar por la “noticia” del momento. Y en muchos casos comprometen a sus interlocutores, colocanles en la boca palabras que no han dicho, pues los inducen siempre a la confrontación y el conflicto, ya que si no hay escándalo, no hay noticias. ¡Mucha fuerza Alejandra y no te asustés si los perros ladran!!